Uno de los involucrados responsabilizó a Cecilia Casas, titular de una ONG, por la desaparición de 100.000 pesos. El intendente Henry Fick dijo que el caso movilizó a los citricultores porque “jamás sucedió nada similar” en la zona.La desaparición de una cifra superior a los 130.000 pesos –dinero que sería destinado a gestiones para percibir subsidios por la helada de junio–, sigue generando acusaciones cruzadas entre los involucrados en la presunta estafa a citricultores de Mocoretá.
Los productores acusaron a dos punteros del kirchnerismo, en tanto que éstos responsabilizaron directamente a Cecilia Casas, una abogada vinculada con el secretario de Comercio Interior de la Nación, Guillermo Moreno, que se habría presentado en la localidad correntina como funcionaria del Ministerio de Salud de la Nación, con promesas de una ayuda económica que deslumbró a los productores de cítricos.
La denuncia la formularon un grupo de productores que fueron tentados con supuestos subsidios y recolectaron una cifra superior a los 130 mil pesos para iniciar las gestiones que nunca se habrían iniciado.
Aníbal Colombo y Carlos Querencio –dos dirigentes del justicialismo– son quienes realizaron el nexo entre los productores citrícolas de Mocoretá y Casas, quien trabaja en el Ministerio de Salud de la Nación, en el área de Relaciones Institucionales, y preside la Asociación de Usuarios y Consumidores de la Argentina.
En ese contexto, alrededor de 30 productores realizaron aportes para pagar los honorarios profesionales de los técnicos que harían el relevamiento de los daños. Luego viajaron a Buenos Aires con el dinero y la promesa de una reunión con Moreno. Ahora denuncian que la plata desapareció y que jamás fueron recibidos por el secretario de Comercio.
Querencio asumió la responsabilidad de haberse contactado con Casas, aunque sostuvo que no tuvo responsabilidad en la estafa. Además, aseguró que Colombo no tuvo que ver con lo que pasó respecto del dinero.
“Es un puntero político que trabaja mucho en el área social y tanto él como yo fuimos convocados para ser como un enlace de comunicación con esta señora (Cecilia Casas)”, dijo en declaraciones a radio Chajarí.
Por otra parte, confirmó que el caso está en la Justicia. “Yo me venía dando cuenta de que ella no estaba trabajando dentro de todos sus cabales, pero caímos y fuimos engañados, yo caí como un bebé y si no fuera así no daría mi cara. La verdad que es una vergüenza lo que esta señora hizo”, aseveró el dirigente.
Casas tiene su propio sitio web, a través del cual promociona su campaña con aspiraciones políticas para el estratégico partido de Moreno, en la primera sección electoral bonaerense.
Querencio manifestó que conoce a Casas hace algún tiempo, ya que trabajó con ella, y manifestó que vio “algunas cosas que no funcionaban como debía ser”, a pesar de ello señaló que surgió la posibilidad de obtener un subsidio para los productores y participó en ello.
Aclaró que en el Mercado Central, Casas le dio un maletín y le dijo que se lo llevara a una de sus secretarias. Cuando el productor se dio cuenta de lo que estaba sucediendo, abrió el maletín y allí había parte del dinero. Luego de eso comenzó a buscarla, “porque ella ya tenía el dinero encima, ya que yo se lo había traspasado”.
Según indicó, “Casas no quiso volver más, se quedó con todo, los productores vieron ahí cómo yo la llamaba, ellos discutían con ella por teléfono”. Querencio admitió que es coordinador para algunas actividades que el kirchnerismo desarrolla en la región de Cuyo, Córdoba y la Mesopotamia. Dijo que no cuenta con una oficina ya que su trabajo lo desarrolla en determinadas circunstancias para las que es convocado.
Contó que con Casas se vinculó para llevar medicamentos a Mocoretá. “Fui yo quien la trajo, la gente la conoció, la vieron por televisión local, habló por radio”, y añadió que en el caso de la relación con los productores, oficiaba de coordinador.
“Estoy involucrado directa e indirectamente, pero yo ya hice mi descargo, aunque ella me denuncia a mí como que yo me quedé con todo el dinero”, expresó.
Viernes, 28 de diciembre de 2012
