El capitán "xeneize" se entrenó junto al resto del plantel, luego de haber superado un cuadro febril que le había impedido practicar el martes, y está a disposición para el clásico del domingo ante San Lorenzo.



Riquelme llegó temprano al predio de Casa Amarilla y se entrenó en el gimnasio del club, en una jornada en la que el DT Carlos Bianchi hizo doble turno, con miras al partido ante San Lorenzo por la fecha 14ta. del torneo Inicial, que puede resultar clave para el futuro.

El estratega boquense diseñó ejercicios en el gimnasio y luego dio varias vueltas por la cancha auxiliar número 2, junto al volante Diego Rivero, acompañados por el preparador físico Pablo Santella.

El resto de sus compañeros realizó un trabajo táctico en la cancha principal bajo la atenta mirada de Bianchi.

El entrenador formó dos equipos: uno con mayoría de titulares y otro con suplentes.

El primero alistó a Agustín Orión; Ribair Rodríguez, Claudio Pérez y Daniel Díaz; Cristian Erbes, Pablo Ledesma, Fernando Gago y Juan Sánchez Miño; Leandro Paredes; Juan Manuel Martínez y Emmanuel Gigliotti.

O sea armó un esquema táctico 3-4-1-2.

Los suplentes se alinearon con Emanuel Trípodi; Alan Aguirre, Matías Caruzzo y Guillermo Burdisso; Gonzalo Escalante, Federico Bravo, Joel Acosta y Maximiliano Padilla; Franco Cangele; Claudio Riaño y Nicolas Blandi.

El ejercicio, que duró una hora, terminó 9 a 7 en favor de los titulares y consistió en el hecho de que las tres líneas bien definidas: defensores, volantes y delanteros no podían salir de sus respectivos sectores.

El mediocampista Jesús Méndez y el lateral izquierdo Nahuel Zárate, ambos con traumatismos leves, corrieron alrededor de la cancha y formularon sesiones de kinesiología para cuidarse.

En principio, el técnico tendría planeado ubicar a Ledesma (ya cumplió la suspensión) en lugar de Bravo, mientras que todavía no decidió si Erbes retoma su posición de marcador lateral y posterga al mendocino Méndez.

O bien si el uruguayo Ribair Rodríguez, ya repuesto de un desgarro, entrará por Claudio `Chiqui` Pérez.

El plantel almorzó en el club y luego durmió la siesta en el predio del que disponen los juveniles enfrente de Casa Amarilla.

Por la tarde, un grupo realizó un trabajo de fútbol reducido y se integraron cuatro equipos de seis jugadores integrados de la siguiente manera: Vicentini, Acosta, Riaño, Ribair Rodríguez, Paredes y Padilla. Trípodi, Burdisso, Bravo (terminó con un golpe en el tobillo izquierdo), Aguirre, Gago y Gigliotti. Orión, Daniel Díaz, Escalante, Blandi, Martínez y Erbes. D`Angelo, Caruzzo, Sánchez Miño, Ledesma, Cangele y Claudio Pérez.

Riquelme tuvo la tarde libre, en tanto Méndez, Zárate y Marín trotaron diferenciado y luego hicieron trabajos de kinesiología.

Mañana, los xeneizes se entrenarán a las 16.30, a puertas cerradas, en Casa Amarilla, y allí el técnico auriazul delineará el probable equipo para enfrentar el domingo a San Lorenzo, a las 18.15, con el arbitraje de Germán Delfino.

El viernes Boca entrenará por la tarde, y no por la mañana como lo hace habitualmente, y luego Bianchi brindará su tradicional conferencia de prensa.

Jueves, 31 de octubre de 2013